La llegada del invierno marca también el nacimiento de un nuevo año en el calendario andino. Esta noche, la noche más larga del año, se celebrará en Tafí del Valle el Inti Raymi, o Fiesta del Sol.
El festejo comenzará a las 21, con la tradicional velada en el Centro Ceremonial de la comunidad de base Santa Cruz, que se extenderá hasta que el Tata Inti, el sol, muestra sus primeros rayos desde atrás de las montañas.
A partir de las 11 de mañana se realizará, además, un encuentro folclórico en la Escuela Emeta, con músicos y poetas del lugar e invitados de la Comunidad Indígena de Anfama.
Es el tercer año consecutivo que la Comunidad Indígena del Valle de Tafí organiza esta velada, que busca rescatar un rito ancestral de la cultura incaica. Es abierto a todo público.
Otra de las actividades se realizará desde las 20, en el Predio de los Menhires, en la comuna de El Mollar, organizada por la comunidad indígena homónima. Actuarán ballets, grupos musicales de la zona y copleras, y se servirá locro a los que asistan.
Ritual ancestral
El Inti Raymi se lleva a cabo cuando empieza el solsticio de invierno y el sol se encuentra a mayor distancia de la tierra. Es entonces cuando se inician las cosechas.
Inti y su fervor solar aseguraban la continuidad y renovación de la vida; sus benéficos rayos propiciaban las buenas cosechas y la salud, por tanto, de hombres y animales, de acuerdo a los pueblos originarios.
Inti en complementariedad energética con la Tierra (Pachamama), hacen posible la continuidad y prolongación de las condiciones de vida en el Hanan pacha (El mundo de arriba), el Kay pacha, mundo presente y tangible. y el mundo de abajo, Ucu pacha.
Durante la época de los incas, el Inti Raymi era el más importante de los festivales celebrados en el Cuzco, según relata el Inca Garcilaso duraba 15 días, en los cuales había bailes y sacrificios.
En 1572 el virrey Francisco de Toledo (1515-1584) la prohibió por considerarla una ceremonia pagana y contraria a la fe católica, aunque se siguió realizando de manera clandestina.